Las Reformas Capitalistas de la Educaciónen la Argentina y en el MundoTribuna Docente - Diciembre de 2004
El Responsable del Fracaso EscolarAnálisis en Base a Trabajos de L. Vigotsky y R. Baquero
Silvia Jayo
El fracaso de lo habitual
En su trabajo "Lo habitual del fracaso o el fracaso de lo habitual" Baquero (1), plantea que en la psicología del desarrollo y educacional existe un debate sobre la delimitación de las unidades de análisis a considerar, abriéndose tres posiciones.Una de ellas lleva a caracterizar al fracaso escolar masivo como un problema que portan los alumnos; otra que es el resultado de los problemas familiares y/o sociales y una tercera lo plantea como el efecto de la relación mutua de los estudiantes y la escuela, definida como educabilidad.Las dos primeras son señaladas por él como erróneas al considerar que ya sea el alumno o su familia, son determinados como los portadores del problema que resulta de la suma de las individualidades. Ambas concepciones implicarían un mal uso de Vigotsky en la abstracción de la situación, "naturalizando" a la escolaridad. Por lo tanto existiría una homogeneidad en los alumnos y una normalidad en su escolarización.Pero según Baquero "los aspectos individuales son un elemento o momento de procesos que poseen una lógica que excede el nivel individual de explicación" y lo que Vigotsky encontró es que el desempeño autónomo y asistido corresponden a dos niveles diferenciados del funcionamiento psicológico, aunque íntimamente relacionados. La escolarización es un fenómeno social, intencionado y para nada "natural".Su opinión es que el surgimiento de dificultades en el aprendizaje y el fracaso escolar masivo se debe a prácticas de enseñanza y estrategias de trabajo que no consideran a la organización escolar, sumado a los recursos insuficientes y a los límites en la capacitación de los docentes y profesionales que trabajan en educación. Los errores que señalan son: considerar deficiencias a las diferencias, entender al desarrollo como lineal, el error en los dispositivos que visualizan de determinada manera el éxito o fracaso, como la gradualidad o la idea de simultaneidad en los procesos de aprendizaje, etc.Al trabajo de Baquero se lo somete a las siguientes cuestiones: ya que no se puede decir que la psicología y la pedagogía de hace 40 años eran superiores a las actuales, ¿por qué no hay, actualmente recursos suficientes y capacitación docente y profesional, adecuada y suficiente?, ¿por qué no es posible una relación sujeto-escuela que pueda desprenderse, masivamente, de los errores pedagógicos que se señalan?, entender a la escolaridad como natural ¿no corresponde a un señalamiento vulgar de que se ha modificado el contexto social que permitía una masividad mayor en la escolarización con recursos pedagógicos menores?Luego de profundizar en el análisis de las concepciones abstractas de la escolaridad, Baquero vuelve a una de ellas: que un fenómeno social masivo como el fracaso escolar actual puede recortarse de las relaciones sociales imperantes, que la educabilidad puede resultar de una relación alumno-escuela, suspendida en el vacío.
El aprendizaje escolar
De los planteos de Vigotsky, -psicólogo soviético que realizó estudios sobre pedagogía luego de la revolución rusa- se desprende que la maduración psicológica que hace posible la simbolización y el uso de la palabra y el pensamiento, es indispensable para el aprendizaje escolar y, a su vez el aprendizaje escolar contribuye a la formación de la personalidad del niño y el joven, al permitir los procesos psicológicos superiores.El planteo fundamental reside en que todas las funciones psíquicas superiores son relaciones de orden social interiorizadas, base de la estructura social,,, de la personalidad. Así, el instrumento cultural se integra a la psiquis del sujeto, es parte fundamental de la misma.También plantea que la relación entre la inteligencia y el afecto es una de las debilidades de la psicología porque hace aparecer al pensamiento como una corriente autónoma de "pensamientos que se piensa a sí mismos", separados de la plenitud vital, de los intereses y necesidades personales, de las inclinaciones e impulsos del sujeto que piensa. El pensamiento influye sobre los afectivos y volitivos. "La mente enfrenta problemas diferentes cuando asimila los conceptos de la escuela y cuando se la deja librada a su voluntad" (2). La instrucción dada en un área puede transformar y reorganizar otras áreas del pensamiento del niño, no sólo puede seguir a la maduración o marchar a su lado, puede precederla y adelantar su progreso". (3)La instrucción escolar induce el tipo generalizador de percepción (conceptualización) y juega así un papel decisivo al hacer que el niño tenga conciencia de su propio proceso mental.Dentro de los procesos psicológicos superiores se marcan dos etapas: una rudimentaria y otra superior. Entre estos dos estados existe una diferencia en la conciencia adquirida sobre la posesión de los mismos, la voluntad que pueda aplicarse sobre ellos (autonomía) y como se lleguen a usar los instrumentos de mediación que se han adquirido en fases superiores, haciendo hincapié en el grado de descontextualización (que multiplica sus posibilidades de uso en la resolución de problemas). Es en este proceso, es donde interviene la escolaridad, sin ella Vigotsky, plantea que es imposible el acceso a esta etapa. La escolaridad, como proceso de sociabilización específica, es la que permite el acceso al lenguaje escrito y al pensamiento científico.La escolaridad tiene un carácter cultural y como tal es artificial, o sea histórico como opuesto a natural, y se encuentra en un plan o diferente al biológico, es un producto de la acción humana consiente que pugna por el creciente dominio de la naturaleza (en el sentido de volcar sus fuerzas armoniosamente a favor de elevar la vida), la cultura (en el sentido de una sociedad no anárquica, evolucionada) y sobre cada individuo (en las posibilidades de libertad individual sin contradicción con el funcionamiento colectivo).La escolaridad desarrolla herramientas psicológicas -que tienen una naturaleza social- y están dirigidas a gobernar la acción humana, así como la técnica se dirige a gobernar a la naturaleza.Todo lo expuesto revela un sistema organizado o sea disciplinado, esto es intrínseco a la escolaridad y su inexistencia plantea la no escolaridad.La función del docente, en el andamiaje educativo, corresponde al sujeto experto o que tiene más experiencia en determinados saberes que impulsa la apropiación, por parte del sujeto menos experto, del saber. Indudablemente, para ello, debe superar el conflicto que se presenta en relación a la propiedad exclusiva de su propio saber, el poder que ello le confiere y la socialización del saber.La zona de desarrollo próximo, o sea la distancia que existe entre lo que se puede resolver independientemente y lo que requiere del acompañamiento del adulto o de compañeros, es la que permanentemente hay que destruir en el proceso educativo (o sea anularla), para que ambos, experto y menos experto aborden un nuevo desafío.
El asesino loco
El fracaso escolar está indisolublemente ligado al régimen imperante y su superación podrá darse en la superación del capitalismo, porque el capitalismo no puede funcionar sin desocupados, sin guerras contra la población, sin fuerzas represoras que impongan las condiciones más terribles de explotación, dañando el aparato psíquico de los niños y jóvenes.La descomposición social, provocada en la fase imperialista entorpece el proceso, en los jóvenes, para lograr el triunfo del Yo real (se logran mecanismos síquicos maduros introyectivos, la simbolización, el pensamiento y la palabra es el terreno donde se desarrollan los conflictos) sobre el Yo del deseo (prevalecen los mecanismos elementales del aparato psíquico, los conflictos se desarrollan en el nivel de la actuación, no se logra tramitar, simbolizar), para dar paso a procesos psíquicos superiores. Es el sistema social el que promueve que los conflictos se lleven al terreno de la actuación y no estimula ni la internalización, ni la simbolización.Estos recursos no están disponibles a la hora de aprender y son imprescindibles para avanzar en su escolarización.Si las relaciones sociales se derrumban, el resultado de su internalización en el propio proceso de aprendizaje se convierte en algo sumamente tortuoso. Las situaciones sociales específicas requeridas en la escolarización están en deterioro permanente. Permanentemente atacadas. Su elevación intelectual se ve dificultada y no aporta demasiado a la constitución de su personalidad.El capitalismo se mete en la psiquis de los niños y adolescentes, en su desarrollo, trastocándolo como un asesino loco.Por el contrario, los actos colectivos que resultan de la deliberación independiente y en cooperación con otros sectores, como los docentes, y que plantean acciones organizadas en el logro de otro futuro, de otro presente, promueve su desarrollo intelectual, emocional, etc. hacia la conformación de hombres que, con su clase social, se paren frente a la realidad para transformarla y en ese accionar desarrollar las propias posibilidades creativas y de cooperación.En la concreción de terminar con un régimen ya moribundo.
(1) "El fracaso escolar", R. Baquero(2) "El fracaso escolar", R. Baquero(3) "Pensamiento y lenguaje", Lev Vigotsky
http://www.tribunadocente.com.ar/biblioteca/librotd2.htm
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1 comentario:
Fantastic Post, keep the remarks comming
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